Parador de Cangas de Onís

Cuando lo visites te sentirás en otro mundo, con el maravilloso paisaje astur y los Picos de Europa de fondo. Podrás respirar la naturaleza en su máximo esplendor mientras degustas la cocina regional, una de las más sabrosas que hay. El restaurante del Parador de Cangas de Onís te resultará inolvidable.El edificio fue un monasterio benedictino, erigido a partir del año 746. En su clásico comedor disfrutarás las delicias de una cocina asturiana bien preparada: fabes verdinas con almejas y gambas, lomo de merluza a la sidra, tortinos de queso de cabra. Sus sabores son únicos.Al terminar tu comida camina las instalaciones y el patio interior, y luego llénate del paisaje que te rodea… La experiencia del Parador de Cangas de Onís y su restaurante te dejará el mejor recuerdo de la verde Asturias. Conócelo.