Torquemada

Torquemada, piedra y memoria

Bajo el intenso cielo de la Tierra de Campos, la esbelta silueta de la iglesia de Santa Eulalia destaca en el perfil de Torquemada. Este templo, construido en el siglo XVI, combina elementos góticos y barrocos, y custodia en su interior una pila bautismal del siglo XVI y una espléndida espadaña que corona su fachada.

Torquemada tiene un pasado marcado por la historia: fue lugar de nacimiento de Catalina de Austria en 1507 y está vinculado a figuras históricas como Tomás de Torquemada. Su importancia estratégica queda patente en el puente de piedra sobre el río Pisuerga, con 25 arcos, construido en el siglo XVI y considerado uno de los más largos de Castilla y León.

Además, el municipio conserva el encanto de las bodegas tradicionales excavadas en el pago de Quiñones, recordando su antiguo esplendor vitivinícola. Otro de los rincones de interés es la iglesia de Santa Cruz, que conserva una portada románica del siglo XIII, así como la ermita de Nuestra Señora de Valdesalce, situada a las afueras en un entorno de tranquilidad.

Torquemada sigue latiendo a través de sus tradiciones, como las fiestas patronales y la reconocida Fiesta del Pimiento, que cada septiembre reúne a locales y visitantes en torno a los sabores de la tierra.