Calafell

Calafell cuenta con una costa de más de 5 kilómetros de longitud, con varias playas de arena fina y aguas cristalinas.

La playa principal de Calafell, la Platja de Calafell, es una de las más grandes y populares de la Costa Dorada, con servicios y comodidades para toda la familia.

Otras playas cercanas son la Platja de la Cova, una pequeña playa rodeada de acantilados, y la Platja de Sant Salvador, que cuenta con una impresionante vista de la ermita de Sant Salvador.

Todas las playas de Calafell están galardonadas con la bandera azul, un reconocimiento a su calidad y seguridad.

La gastronomía está influenciada por su ubicación en la costa mediterránea, lo que se traduce en una amplia variedad de platos basados en mariscos y pescados frescos.

Uno de los platos más emblemáticos de la región es el «arrossejat», un guiso de arroz con marisco y pescado que se cocina con un caldo hecho con los restos de los crustáceos.

Otros platos populares son la «fideuà», una especie de paella hecha con fideos y mariscos, y la «xatonada», una ensalada de lechuga, bacalao, anchoas y salsa de romesco.

Calafell es una ciudad con un rico patrimonio histórico y cultural.

Uno de los lugares más destacados es el Castillo de Calafell, una fortificación medieval que se encuentra en la cima de una colina con vistas impresionantes al mar.

También es interesante visitar la Iglesia de Santa Creu, construida en el siglo XIII, y el Museo Casa Barral, una casa señorial convertida en museo que alberga una colección de arte y objetos antiguos.

Además, Calafell cuenta con una amplia oferta de ocio y entretenimiento, con parques de atracciones, campos de golf y una gran variedad de tiendas y restaurantes. También es posible disfrutar de actividades al aire libre como senderismo, ciclismo y deportes acuáticos en sus playas.