El Principado de Asturias es, sin lugar a dudas, un lugar de ensueño para todos aquellos aficionados a pasar sus vacaciones en contacto con la naturaleza. En la comunidad asturiana existen cientos de casas rurales para poder disfrutar de las ventajas del turismo rural.
Una tierra mágica plagada de alojamientos rurales
Muchas de las ventajas del turismo rural en Asturias proceden de su riquísima diversidad de paisajes: montañas, ríos, playas y bosques que recorrer, un paraíso en cada valle y cada cala que podemos recorrer de cabo a rabo sin cansarnos y descubriendo a cada paso un nuevo tesoro.
Otro punto fuerte de Asturias es su increíble cantidad de casas y alojamientos rurales; más de mil establecimientos abiertos, 9,9 casas rurales por cada 10.000 habitantes.
El alojamiento rural se ha convertido en la modalidad preferida del Principado para atraer turismo, y la Administración autonómica apoya esta política como alternativa de futuro para la comunidad. Las exigentes políticas de calidad han llevado a estos establecimientos a ser algunos de los más solicitados del país.
Como hay casas rurales en cada comarca, podemos elegir qué faceta de Asturias queremos conocer en nuestras vacaciones y usar el alojamiento como «campamento base» para nuestras exploraciones, desde las que aprender a amar la belleza de las playas de Ribadesella o Llanes, los espacios naturales de Ponga o Somiedo, la majestuosidad de los Picos de Europa o la región de Los Oscos…
Al mismo tiempo que disfrutamos de un entorno natural y de preciosos paisajes en cuanto ponemos un pie fuera de la casa, gozaremos en ella de todas las ventajas de la vida moderna, de la calefacción y la buena comida puesta en el plato: lo mejor de los dos mundos.
Cultura tradicional, gastronomía y salud en Asturias
A Asturias se le conoce, además de por sus paisajes, por sus ricas tradiciones.
Hospedándonos en establecimientos de turismo rural situados en algún bello valle asturiano tendremos acceso rutas culturales para conocer los castros, restos arqueológicos, monumentos y museos que jalonan el rural de la comunidad.
También hay otra cultura de capital importancia: la gastronómica. Las casas rurales del Principado de Asturias se enorgullecen de incluir en su menú las diversas denominaciones de origen: La Sidra asturiana, los excelentes quesos de Gamonéu (Cabrales, Casín, Afuega´l Pitu), el Chosco de la zona de Tineo, los productos del Mar Cantábrico… Todos estos productos saben mejor en una vieja casona restaurada y hecha de piedra, después de levantar el apetito con un paseo por plena naturaleza y aproximarnos a este aspecto de la vida que ha marcado tan fuertemente el sentir asturiano.
Las rutas de senderismo, los paseos a caballo y los deportes de aventura son otras tantas opciones que se nos abren si nos hospedamos en los alojamientos rurales de esta bella tierra. Una forma de pasar las vacaciones en la que tendremos que hacer ejercicio en plena naturaleza, un deporte realizado al aire libre. E incluso sin ellos, el mero hecho de pasar unos días relajado en esta tierra libre de contaminación es una inversión en salud.