La curva de María

Bienvenidos a un destino increíble como el Parque Natural Saja-Besaya ubicado en el corazón de Cantabria, donde te abre sus puertas La Curva de María, un lugar con encanto diseñado para ofrecer el máximo confort a sus huéspedes. 

Rodeada de montañas y a escasa distancia del mar, La Curva de María está formada por un alojamiento rural, una sala de eventos y una tienda vintage con objetos de colección, auténticas antigüedades y elementos decorativos. 

Te presentamos cada una de las estancias que podrás reservar en La Curva de María, dos alojamientos diseñados para albergar a 3/4 personas en La Casita, y 6 personas de forma parcial u 11 si es alquiler íntegro del espacio, en el Apartamento Rural.

La Casita se localiza donde antiguamente estaban las horneras, hoy convertida en una espectacular estancia para 3/4 personas donde se ha cuidado cada detalle para ofrecer un espacio cómodo y acogedor. Se distribuye en dos habitaciones dobles, una de ellas de gran tamaño, y la otra ubicada en un pequeño altillo abierto a la zona del salón. La sala de estar cuenta con amplios espacios y chimenea de leña. La cocina está equipada con menaje y utensilios de hogar. El baño, dotado de todo lo necesario, dispone de vestidor. En el exterior de La Casita disfrutarás de patio compartido donde existe mobiliario de terraza, ideal para relajarse y respirar aire puro. Este alojamiento admite mascotas, pero recuerda consultar antes las condiciones. 

El Apartamento Rural, ubicado en la parte superior de la casa principal, se presenta en modalidad de alquiler íntegro o parcial, adecuándose a las necesidades del viajero. Cuenta con entrada independiente al igual que La Casita. Se distribuye en un gran salón, cocina americana, dos baños y varias habitaciones dotadas de cama de matrimonio o dos camas individuales. El alojamiento cuenta con una preciosa terraza con vistas al huerto y al entorno. No admite mascotas. 

Ambas estancias están equipadas con electrodomésticos, conexión Wifi, televisión, ropa de cama y baño, entre otras comodidades. 

La Curva de María ha conservado el encanto de la estructura original del edificio, restaurando algunos de los elementos arquitectónicos típicos de la zona. 

Tanto la decoración, como los espacios que integran La Curva de María, están pensados para que los huéspedes desconecten, descansen y descubran un destino tan hermoso como Cantabria, ya que este será un estupendo punto de partida para conocer San Vicente de la Barquera, Cabezón de la Sal, Santander, Comillas, Santillana del Mar, entre otros lugares.